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El caluroso verano de 1854 estuvo acompañado de una epidemia de cólera en la ciudad de Barcelona. Muchos barceloneses marcharon a los pueblos vecinos, provocando incluso un aumento del contagio.
En un primer momento afectó a Barcelona, Mataró, Vic, Manresa, Igualada, Vilanova i la Geltrú, Vilafranca, L´Hospitalet, Gràcia, Cornellà y El Prat.
“Los Médicos no entendían tanto mal, que mucha gente muriera sin tener asistencia; que muchos Maridos dejaran a las propias Mujeres y las Mujeres a sus Maridos”.
En El Prat, la muerte de sus aldeanos fulminó algunas casas o masías. La gran cantidad de entierros hizo que la Iglesia bendijera un trozo del Campo de la Iglesia, aumentando el Cementerio de Hoyos, es decir, el cementerio parroquial.
La historia de los cementerios parroquiales del Prat está relacionada con el contexto histórico del momento. En el cementerio parroquial ubicado en el Campo de la Iglesia, alrededor del Ayuntamiento del Prat, en todas las reformas y ampliaciones han aparecido huesos.
Sólo el estudio arqueológico y antropológico de los entierros y los restos humanos nos puede explicar el contexto sufrido por los vecinos de El Prat.
El Cementerio Municipal del Prat de Llobregat (Barcelona) ha puesto en marcha un programa para el fomento de la sostenibilidad y la biodiversidad del recinto. Y es que, por su ubicación -en una zona muy próxima al aeropuerto internacional de Barcelona y a la vez a solo 300 metros de distancia de los espacios protegidos del delta del río Llobregat-, la gestión del cementerio del Prat representa un gran reto en relación a la contaminación ambiental y al fomento de la flora y la fauna propias de este territorio, muchas de ellas amenazadas.
• Por un lado, el camposanto ha puesto en marcha el estudio de cálculo de la Huella de Carbono. Este análisis, realizado en colaboración con la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB), tiene por objetivo contribuir a la mejora de la sostenibilidad ambiental de la zona, así como de la calidad de vida de los habitantes del Prat. Se trata del primer cementerio de España que realiza un análisis de este tipo. El recinto, gestionado por la empresa GIC de Nomber, cuenta además con la norma ISO 14001.
• La medida de la Huella de Carbono en el cementerio del Prat permite conocer en qué actividades del equipamiento se concentra el mayor impacto en términos de cambio climático. El análisis evalúa y prioriza las mejores opciones que tiene el centro para reducir dicho impacto ambiental eficazmente.
• En el estudio destacan como aspectos de mayor peso:
El transporte de los trabajadores al centro de trabajo
La generación de residuos
El consumo energético
MEDICIONES HUELLA DE CARBONO CEMENTERIO MUNICIPAL DEL PRAT DE LLOBREGAT
Numero de servicios: 340
Alcance de emisiones
Huella de Carbono - kg CO2 eq
Alcance 1: Emisiones directas
115.32
Alcance 2: Emisiones indirectas derivadas del consumo energético
5,526.22
Alcance 3: Otras emisiones indirectas
31,770.71
TOTAL
37,412.25
Impacto relativo de cada etapa
Gráfico de barra con todas las categorías de impacto
Inhumaciones cenizas columbario
Inhumaciones cenizas Bosc de la Calma
Esparcir cenizas
Inhumaciones tumba/panteón
Traslados
Consumo energético
Residuos
Inhumaciones cenizas en nicho
Inhumaciones cenizas Árbol familiar
Inhumaciones nicho/osario
Exhumaciones
Transporte trabajadores
Otros consumos
Transporte operativo (cementerios)
Huella de carbono
• Por otro lado, el cementerio del Prat realizó una evaluación preliminar de la biodiversidad para determinar de qué manera el recinto incide en ella y cómo, a su vez, depende de la misma. Por su situación geográfica –en la zona del delta del río Llobregat y colindante con los “Espacios Naturales del Delta del Llobregat”-, la biodiversidad adquiere un peso muy relevante en este camposanto. Así puede observarse en las imágenes que adjuntamos en esta documentación.
En esta línea, las mil hectáreas de los “Espacios Naturales” ubicadas en la fachada de litoral destacan por su alto valor ecológico y paisajístico, condición que reconoce la protección obtenida en el marco de la Red Natura 2000. Ésta es una de las zonas húmedas más importantes de Catalunya y además está declarada como Zona de Especial Protección para las Aves. De hecho cuenta con la presencia de más de 350 especies de aves, es una ruta de migración anual de miles de aves y allí se encuentra el 90% de la población mundial de gaviota de Audouin (en catalán, gavina corsa).
Sorprende que esta zona, comprendida entre el macizo del Garraf y Montjuïc, y que cuenta con la presencia de variadas actividades humanas, aún conserve un patrimonio natural tan consistente. Dentro del mismo cementerio se ha detectado la presencia de dos elementos con alto valor en biodiversidad:
Orquídeas del Prat: el delta del río Llobregat tiene 22 especies diferentes de orquídeas.
Quirópteros, que tienen una importante función para el control de plagas, en particular ahora que la amenaza del mosquito tigre, ya son una realidad en la zona.
Como se recoge en el check de biodiversidad, preocupan cuatro potenciales amenazas para la biodiversidad (o causas de pérdida de biodiversidad):
1. Zona muy antropizada: el Delta del Llobregat se encuentra rodeado por el área metropolitana de Barcelona con la presencia de grandes infraestructuras (aeropuerto y puerto de Barcelona) y polígonos industriales.
2. Gran vulnerabilidad ante los efectos adversos del cambio climático (salinización, inundación, etc.), ya que se trata de una zona húmeda.
3. Especies invasoras que afectan negativamente a la flora y la fauna autóctonas. Las causas de presencia de especies invasoras en la zona está relacionada con comportamientos por parte de los visitantes (por ejemplo el abandono de peces rojos -utilizados como mascotas-, que destruye las comunidades de anfibios) y la propia presencia de las infraestructuras de transporte (aeropuerto y puerto) que acarrea el transporte de especies foráneas.
4. Las malas prácticas agrícolas: se han eliminado en la zona muchos puntos de agua, lo que ha provocado la pérdida de casi un 80% de anfibios. Además, la contaminación aporta sustancias que afectan la biodiversidad.
• La riqueza en cuanto a número de especies y las preocupantes amenazas que ejercen presión sobre este patrimonio en biodiversidad señalan el alto valor que tiene este espacio y la incidencia que pueden tener las actividades del centro en su entorno más directo.
• En este sentido, el Cementerio del Prat ha invitado al Consorcio para la Protección y la Gestión de Los Espacios Naturales del Delta del Llobregat a visitar el centro y ha encargado una diagnosis y la definición de las propuestas más adecuadas. Sobre esta base, se ha definido un programa de actuaciones a medio y largo plazo con el objetivo de que se genere una relación de colaboración más allá de una simple actuación o proyecto concreto. En particular, se identifican las siguientes líneas de trabajo:
- Asegurar que se reduce el impacto ambiental de todas las actividades del cementerio para limitar las afectaciones adversas en la zona.
- Trabajar para que el cementerio pueda ser la “extensión natural” de los espacios naturales del Delta del Llobregat, compenetrándose y compartiendo objetivos y formas de trabajar.
- Asegurar que las actuaciones a favor de la biodiversidad que se lleven a cabo dentro del centro sean coherentes con aquellas que se realizan en los Espacios Naturales y, de esta manera, sumar esfuerzos con los demás actores presentes en la zona. En particular, se potencia:
o La población de quirópteros o murciélagos: son un grupo de mamíferos clave en el control de poblaciones de insecto, en especial, de los mosquitos. La falta de refugios hace que algunas especies estén en regresión. Se instalarán cajas para la nidificación, descanso e hibernación en lugares adecuados del cementerio.
o Las condiciones para que la población de dos especies de rapaces nocturnas, el búho común y la lechuza, vuelvan a ocupar su hábitat.
o La creación de una colonia de cría de golondrinas cola blanca: se instalarán cajas-nido para intentar establecer una colonia de cría, ya que hay varias de ellas en la ciudad. Son especies que también ayudan a controlar las poblaciones de insectos.
o Acciones para favorecer las golondrinas comunes, que han sufrido una fuerte regresión en el Delta. Se colocarán cajas-nido para fomentar su nidificación.
o La presencia de lagartijas, muy amenazadas en la zona, a raíz de los plaguicidas usados en el parque agrario. Se instalarán grupos de pequeñas rocas o troncos en diversas zonas del camposanto.
o La plantación de especies herbáceas y arbustivas autóctonas del delta en diversas zonas del cementerio: revegetación de una zona sin urbanizar ni ajardinar y reconversión de algún parterre cubierto de hiedra o hierba en un espacio con arbustos mediterráneos. En especial, se creará una zona específica para fomentar las orquídeas autóctonas. Estas actuaciones favorecerán la atracción de mariposas.
- Comunicar e implicar a la ciudadanía para así corregir aquellos comportamientos que, por falta de conocimiento e información e, independientemente de que los ciudadanos los lleven a cabo dentro fuera del cementerio, pueden amenazar las especies y sus hábitats.