Templo de Santa Eulalia
Se trata de un santuario tardorromano datado entre los siglos III y IV, situado en la parroquia de Santalla de Bóveda de Mera, a unos 14 quilómetros de la capital. Está semienterrado al lado de la actual Iglesia de Santalla. Fue descubierto en 1926, y declarado Monumento Nacional en 1931.
Se admite que se trata de un templo pagano, con diferentes teorías sobre su finalidad, cristianizado siglos más tarde. Está considerado un unicum al no existir ningún otro edificio de las mismas características en todo el territorio ocupado por el imperio romano.
En 1931 fue declarado Monumento Nacional, y en 1985 Bien de Interés Cultural.